Alergias e Inmunología
La alergia es una hipersensibilidad a una sustancia concreta que, si se inhala, ingiere, toca o inyecta produce unos síntomas característicos.
La sustancia a la que se es alérgico se denomina ‘alérgeno‘, y los síntomas provocados son definidos como ‘reacciones alérgicas‘.
Cuando un alérgeno penetra en el organismo de un sujeto alérgico, su sistema inmunitario responde produciendo una gran cantidad de anticuerpos llamados IgE. Estos anticuerpos se fijan a unas células llamadas mastocitos y basófilos que están en la piel, nariz, bronquios, etc.
La sucesiva exposición al mismo alérgeno hace que cada vez haya más anticuerpos IgE y que éstos puedan unirse al alérgeno sobre los mastocitos. La unión del alérgeno con los anticuerpos IgE provoca que los mastocitos liberen sustancias, como la histamina, que producirán los síntomas típicos de la alergia.
¿Qué es?
Es la reacción que ciertas personas (pacientes alérgicos) tienen frente a determinadas sustancias (alérgenos).
¿Cómo se produce?
Es una reacción inmunológica que depende, en la mayoría de los casos, de la producción de un tipo especial de anticuerpo (inmunoglobulina IgE). Los anticuerpos IgE son específicos y reaccionan con un alérgeno determinado. La IgE se une a la superficie de unas células (mastocitos) a las que activa si reacciona con el alérgeno. El mastocito activado libera histamina y otras sustancias cuyos efectos producen los síntomas de la alergia.
¿Cuándo ocurre?
Cuando el paciente se expone al alérgeno, ya que es entonces cuando los anticuerpos IgE reaccionan con él.
¿Dónde se produce?
En los tejidos a los que llegue el alérgeno, ya que los anticuerpos IgE están distribuidos por todo el organismo. Los alérgenos que penetran por inhalación producen reacciones a nivel de nariz y bronquios (alergias respiratorias), los que lo hacen por vía digestiva principalmente reacciones en el tracto digestivo (alergias alimentarias), y los que penetran por vía parenteral (inyecciones) y se distribuyen por la sangre, reacciones generalizadas.
¿Por qué aparece?
Los pacientes alérgicos tienen facilidad para producir anticuerpos IgE contra los alérgenos a los que se exponen. Existe una predisposición genética que determina esta facilidad, por lo que las enfermedades alérgicas son frecuentes en hijos de padres alérgicos.
Mientras que los alérgenos (p. ej, pólenes, alimentos) son inocuos para las personas no alérgicas, a los alérgicos les produce enfermedad. Ello es debido a que el sistema inmune de estos pacientes tiene una facilidad especial para producir anticuerpos IgE frente a los alérgenos.
Las personas no alérgicas también producen estos anticuerpos, pero no están dirigidos contra los alérgenos sino como mecanismo de defensa contra ciertos parásitos.
Las causas principales son:
1. Predisposición genética
Determina la facilidad para producir anticuerpos IgE. En general las enfermedades alérgicas tienen un carácter hereditario y son más frecuentes entre padres e hijos de individuos alérgicos.
2. Naturaleza del alérgeno
Determina la capacidad de estas sustancias para inducir la producción de anticuerpos IgE. Los alérgenos pueden, por distintos mecanismos, modular el tipo de respuesta inmunológica que da el organismo frente a ellos, potenciando la respuesta proalérgica en los pacientes.
3. Factores ambientales
Determinan el grado de exposición a los alérgenos e influyen sobre el potencial alergénico de los propios alérgenos. Estos factores son los que justifican el incremento de las enfermedades alérgicas en las últimas décadas. Factores como la contaminación del aire en las ciudades, la alimentación o las medidas higiénicas (menor carga bacteriana), influyen sobre la respuesta inmune, favoreciendo las respuestas proalérgicas en cada vez mayor número de personas.
¿Qué son?
Los alérgenos son sustancias extrañas al organismo con unas características especiales.
La razón por las que ciertas sustancias tienen más capacidad alergénica que otras no es bien conocida. Posiblemente se deba a factores que determinan su capacidad de interacción con componentes de la inmunidad innata (un tipo primitivo de defensas).
La gran mayoría de los alérgenos penetran en el organismo por medio de la respiración o la alimentación. Los primeros están presentes en el aire que respiramos (inhalantes ambientales), los segundos son alimentos o vehiculados por ellos. Existen otros alérgenos que penetran a través de aguijones (venenos). Los medicamentos también pueden ser alérgenos.
Existen alérgenos que sensibilizan por contacto directo con la piel. Estas sustancias (metales, gomas, tintes) no son alérgenos estrictos y producen alergia (dermatitis por contacto) por un mecanismo en el que no participan los anticuerpos IgE.
1. Inhalantes ambientales
Son alérgenos que se transportan por el aire e impactan en la mucosa respiratoria de nariz y bronquios al respirar. Son los responsables de las Alergias Respiratorias (rinitis, asma bronquial).
Los más importantes por su frecuencia son:
- Pólenes de hierbas (gramíneas), malezas, arbustos y árboles.
- Ácaros del polvo.
- Esporas de hongos.
- Epitelios de animales.
- Insectos
2. Alimentos
Cualquier alimento puede provocar alergia. Son los causantes de las Alergias Alimentarias que afectan principalmente al aparato digestivo, pero pueden llegar a pasar a la sangre y provocar reacciones generalizadas. Los más importantes por su frecuencia son:
- Leche de vaca.
- Pescados y mariscos.
- Frutos secos.
- Frutas
3. Venenos
- Veneno de avispa.
- Veneno de abeja.
4. Medicamentos
- Antibióticos (Penicilina, Estreptomicina).
- Antipiréticos (Pirazolonas).
Las enfermedades alérgicas más frecuentes están mediadas por anticuerpos IgE. Afectan a un porcentaje muy alto de la población. Son alergias que se manifiestan muy rápidamente tras contactar con el alérgeno (menos de 30 minutos). Ejemplos típicos son las alergias debidas a alérgenos que están en el aire y que provocan Conjuntivitis alérgica, Rinitis alérgica, y/o Asma bronquial. Tambien son muy frecuentes las alergias alimentarias mediadas por IgE.
Otras alergias se desarrollan bajo otros mecanismos inmunológicos, sin participación de la IgE. Las más frecuentes son las Dermatitis por contacto, debidas a alérgenos muy pequeños que atraviesan la piel intacta y que producen una reacción a las 24-48 horas en el sitio del contacto. La Enfermedad Celiaca es otra enfermedad alérgica que no depende de la producción de IgE, y en donde existe una sensibilización al gluten (proteína del trigo/centeno).
Las intolerancias (p. ej., a la aspirina, lactosa, etc) no son verdaderas alergias, ya que estas sustancias no actúan como alérgenos, ni dependen de un mecanismo inmunológico frente a ellas.
Se manifiesta con estornudos, secreción nasal, picor, congestión nasal. Se suele asociar a manifestaciones oculares (rino-conjuntivitis alérgica).
Los síntomas de la rinitis alérgica se confunden frecuentemente con los de un resfriado común. Las diferencias más notables entre estas dos patologías son:
Resfriado común: La causa es viral (rhinovirus) Dura de 7-10 días y se presenta con frecuencia ocasional. Los síntomas son secreción nasal mucosa (densa), dolor de garganta frecuente, tos, estornudos frecuentes pero aislados y fiebre.
Rinitis alérgica: La causa es la sensibilización a alérgenos inhalantes. Dura mientras los alérgenos estén presentes en el ambiente, por lo que suele ser recurrente. Los síntomas son secreción nasal acuosa («agüilla»), picor de nariz y a veces paladar; estornudos muy seguidos (en salvas). Sin fiebre. Rara vez dolor de garganta.
Los alérgenos responsables de la rinitis alérgica son los inhalantes ambientales
El asma bronquial es la obstrucción pasajera de los bronquios, lo que produce dificultad respiratoria con sensación de ahogo y fatiga. Son típicos los silbidos o «pitos» (sibilancias) audibles por el enfermo durante la respiración ocasionados por la estrechez bronquial.
Hay varios tipos de asma. El asma de causa alérgica se conoce como asma extrínseco porque está ocasionado por un agente externo (alérgeno) Cuando el aire lleva alérgenos (p. ej., pólenes) se produce en los pacientes sensibles una reacción alérgica a nivel de la mucosa bronquial. Esta reacción provoca una contracción de los músculos que rodean los bronquios (broncoconstricción) y una reacción inflamatoria que reduce la luz bronquial, con la consiguiente dificultad respiratoria. Cuando desaparece la reacción, el paciente vuelve a respirar sin fatiga.
Como en el caso de la rinitis alérgica, el asma puede aparecer solo en algún periodo determinado del año coincidiendo con la presencia del alérgeno en el aire. Es el llamado asma estacional (p. ej., asma polínico). En otras ocasiones el alérgeno está presente de forma más o menos continua a lo largo de todo el año, provocando un asma denominado perenne (p. ej., asma a ácaros). Otras veces el asma se asocia a alérgenos presentes en determinados lugares o centro de trabajo (asma ocupacional)
Es importante esclarecer el tipo de asma que tiene el enfermo y, en su caso, el alérgeno responsable para poder establecer un tratamiento específico (inmunoterpaia y/o medidas de evitación). En el asma polínico el tratamiento sintomático se realizará sólo durante la época de polinización.
Los alérgenos responsables del asma alérgico son los inhalantes ambientales.
Urticaria
Es muy frecuente. Aparecen ronchas rojas y habones pruriginosos (con picor) en la piel. Tienen una duración transitoria (de unas pocas horas). La urticaria se produce por la liberación de histamina y otras sustancias por los mastocitos de la piel.
Esta liberación puede ser por causas inmunológicas (urticaria alérgica) y no inmunológicas (por frío, calor, etc.). La mayoría de ellas, sin embargo, son de causa desconocida (urticarias idiopáticas). A veces se asocian a parasitosis intestinales. Pueden aparecer de forma aislada o repetida, llegándose en ocasiones a cronificar.
La urticaria alérgica es producida por un mecanismo mediado por IgE. Representa menos de un 3% de todas las urticarias. Los principales alérgenos son alimentos y medicamentos. Hay una relación clara entre la causa y el efecto ya que la urticaria aparece como una reacción inmediata a la puesta en contacto con el alérgeno.
Dermatitis Atópica
Aparece en aproximadamente el 2% de niños menores de 2 años. Hay picor severo y sensibilización a diferentes alérgenos. Hay alteraciones inmunológicas con un incremento de la IgE en sangre, pero no hay una relación causa-efecto conocida.
El intenso picor induce el rascado y la aparición de lesiones secundarias. Hay una importante base hereditaria, y por ello suele haber antecedentes familiares.
Dermatitis por contacto
Es muy frecuente. Se produce como consecuencia de la sensibilización con alérgenos que entran en contacto a través de la piel. Se producen unas lesiones rojas con picor y sensación de quemazón, a veces formadas por pequeñas vesículas y descamación. Las lesiones suelen estar circunscritas al sitio donde el alérgeno contacta con la piel.
Los alérgenos son sustancias como metales (níquel, cromo), cosméticos, perfumes, tintes o gomas, que penetran con facilidad a través de la piel e inducen una respuesta inmunológica.
Afectan a un porcentaje alto de la población (hasta un 7%).
Es más frecuente en niños y se suele manifestar a partir del primer año de vida. Los síntomas más frecuentes son inflamación y picor de boca, diarrea y vómitos.
Pueden darse reacciones generalizadas, al pasar los alérgenos a la sangre desde el intestino.
Estas reacciones pueden manifestarse en la piel (ronchas y picor) y de una forma más severa (asma bronquial y choque anafiláctico).
Las manifestaciones orales y cutáneas con picor es un signo que diferencia una verdadera alergia mediada por IgE de una intolerancia a algún alimento.
Los alimentos que más alergia producen son la leche y el huevo en niños, y el pescado y los frutos secos en adultos, pero puede haber alergia frente a casi cualquier alimento. A veces los alérgenos son otras sustancias transportadas por el alimento, (p. ej. Anisakis simplex, larva que parasita pescados) y no el alimento en sí.
Alimentos relacionados pueden compartir alérgenos y por ello se reacciona contra varios alimentos a la vez. Los principales grupos son:
• Zanahoria, apio, anís, manzana, patata.
• Cereales: trigo, centeno, cebada, avena, maíz, arroz.
• Merluza, anguila, salmón, trucha, atún.
• Ajo, cebolla, espárragos.
• Guisantes, lentejas, regaliz, soja, judías, avellanas, hinojo.
• Melocotón, albaricoque, ciruela, plátano.
• Gambas, cangrejo, langosta, calamar.
También existen relaciones entre otros alérgenos y alimentos:
• Polen de gramíneas: melocotón.
• Polen de abedul: manzana.
• Polen de artemisia: apio.
• Plumas de periquitos, canarios: huevo.
• Látex: aguacate, plátano, castaña, kiwi, nuez, melocotón.
1. Necesidad de diagnóstico.
La alergia es una enfermedad que debe ser diagnosticada identificando el alérgeno causal, aunque muchas veces esto no es posible. Saber a qué se es alérgico es extremadamente útil para evitar el alérgeno o adoptar medidas para disminuir su exposición. También para que podamos utilizar medicación preventiva y optar a vacunas específicas (inmunoterapia).
2. Necesidad de control.
No hay que considerar la alergia como una enfermedad menor. Las alergias respiratorias suelen tener una duración larga, haciendo más incómodas las actividades de la vida diaria, dificultando el sueño, las actividades sociales, el ocio, la concentración en el trabajo o la escuela y disminuyendo la calidad de vida. Por otro lado, la evolución de la alergia desde formas leves (conjuntivitis y/o rinitis alérgica) hacia las más severas (asma bronquial) es frecuente, y se considera como una evolución natural de la enfermedad. Finalmente, algunas reacciones alérgicas pueden ser muy severas, e incluso mortales (choque anafiláctico).
Historia:
Tienen su origen hace más de 100 años (Noon y Freeman, 1911). Estos médicos las empezaron a utilizar con éxito para tratar la alergia al polen ya que pensaban, erróneamente, que la alergia era causada por una toxina del polen.
Emplearon por tanto la vacunación de forma similar a lo que se estaba haciendo con éxito para combatir otras toxinas como la de la difteria o tétanos.
Las vacunas antialérgicas son vacunas terapéuticas (inmunoterapia) que se usan para disminuir la reactividad de los pacientes alérgicos a sus alérgenos.
Con ello disminuyen a su vez los síntomas y se evita la progresión de la enfermedad alérgica. Para que sean eficaces hay que ajustarlas a la sensibilización de cada paciente por lo que en la mayoria de los casos son preparados individualizados que se fabrican según la reactividad del enfermo.
Las alergias suceptibles de ser tratadas con estas vacunas son las debidas a pólenes, ácaros, hongos, epitelios, insectos o venenos.
Diagnóstico:
Alergenos para diagnóstico de sensibilización por Prick Test.
Portafolio completo de los siguientes grupos
- Pólenes
- Ácaros
- Hongos
- Alimentos
- Látex
- Profilinas
Diagnostico de Alergia a Betalactámicos
- DAP Penicilina
- DAP Clavulánico
- DAP Amoxicilina
TRATAMIENTO
En nuestro catalogo tenemos alergenos para prick test, profilinas y LTp1, diagnostico de alergia a Betalactámicos, Inmunoterapia subcutánea con Alergoides polimerizados e Inmunoterapia molecular, Inmunoterapia sublingual Spray, Inmunoterapia con mezcla de Polimerizados al 100% concentración, y tratamientos de desensibilización para alergias a venenos de himenópteros.
Alérgenos para Inmunoterapia específica.
- Pólen
- Ácaros
- Epitelios
- Alternaria
- Apis